Acompañamiento en la educación emocional

La falta de capacidad de gestionar las emociones es un grave riesgo en los tiempos actuales y es importante que los adultos tengan un acompañamiento en la educación emocional de los niños y adolescentes.

Si los adultos con los que conviven los niños y adolescentes buscan darles un acompañamiento en la educación emocional deberán verbalizar sus sentimientos cuando están tristes, alegres, enojados y no responder a estos de manera impulsiva. De esta forma ayudarán a sus hijos a que en su niñez y adolescencia enriquezcan su vocabulario emocional y aprendan a controlar impulsos, por lo tanto, aprenderán que las emociones son legítimas, que no son ni malas ni buenas en sí mismas, que lo reprochable es el comportamiento impulsivo, la respuesta incorrecta que se origina de ellas.

A manera de una guía general presentamos algunas estrategias prácticas en el proceso de acompañamiento a los niños y adolescentes en el hogar, en lo relacionado con la educación emocional, útiles para una sana convivencia.

1. Reconocer las emociones

Reconocer en cada momento de la vida las emociones básicas: miedo, alegría, tristeza, ira (rabia), asco (aversión) y sorpresa, así como a expresar sus sentimientos.

2. Afrontar las emociones

Saber afrontar las emociones con ejemplos (es mejor decir qué le molesta que gritar, pegar), de tal modo que se sientan seguros ante sus emociones y sentimientos, que los mismos no son ni buenos ni malos y que van a acompañarnos durante toda la vida.

3. Gestionar de manera asertiva

Gestionar la ira, la frustración, etc., para lo que es necesaria la aplicación gradual de límites y normas.

4. Saber escuchar de verdad

Saber escuchar de verdad, que el niño sienta que lo que él dice u opina sí es valioso, que sí se le toma en cuenta, que en la casa siempre habrá un diálogo justo porque de esta forma lograremos un vinculo más sano y fuerte.

5. Activar la empatía

Activar la empatía con ejemplos sencillos: “¿cómo crees que se siente tú amigo después de que le pegaste?”,” ¿por qué crees que tu hermana está llorando?”.

6. Vivir sentimientos de toda clase

Vivir sentimientos de toda clase y así acabar comprendiendo que siempre hay una luz al final del túnel, para lo cual es necesario practicar la lectura en voz alta de historias y tener siempre claro que ninguna emoción es mala.

Por lo tanto, cuando los niños y jóvenes aprendan a gestionar las emociones propias y las del otro lograrán la sana convivencia, a través del respeto, de la capacidad de compartir y de trabajar en equipo.

Esta formación debe ser integral y la escuela es fundamental para lograr un acompañamiento completo en la educación emocional, en Colegio Vallarta, a través de de Inner Kore en la materia Heedfulnees, trabajamos el desarrollo de la inteligencia emocional, la salud mental, el bienestar general y la habilidad de mantener la atención enfocada.